16 Nov
16Nov

La redacción de la tesis se puede volver un trabajo cuesta arriba y para ayudarte en tan importante labor te presentamos estos 10 consejos para facilitar su elaboración. Primero, debemos tener en cuenta que una tesis es la comprobación definitiva de los conocimientos adquiridos durante nuestros estudios. La finalidad es poner en manifiesto la creatividad, la originalidad y el adiestramiento metodológico del tesista.

En vista de lo anterior, te presentamos los siguientes consejos que te ayudarán a iniciar el proceso de realización de la tesis.

1- Infórmate sobre el tipo de trabajos aceptados en tu universidad o instituto: esto te permitirá analizar el tipo de investigación que mejor se adapta a tus intereses y posibilidades. Ten presente que los tipos de investigación son los siguientes:

Investigación de campo: se estudia un tema o problemática a partir de la recolección y análisis de datos directos de la realidad. En estos casos es necesario utilizar el estudio estadístico, no es necesario ser un experto en la materia, pero si se deben manejar ciertas nociones y criterios para este tipo de trabajo.

Investigación documental: es el estudio de un problema a partir del análisis de datos y teorías previamente publicados en otros trabajos. En este tipo de investigaciones el autor utiliza las fuentes de consultas para postular sus propias ideas y conclusiones.

Proyecto factible: propuesta de un modelo que podría ser la solución a una determinada problemática. Este tipo de proyectos sirven para elaborar propuestas de impacto social o institucional.

Proyecto especial: son trabajos de creación de soluciones de interés cultural, ejemplos: los proyectos educativos, software, tecnologías, proyectos de creación artística y literaria.

2- Evalúa tus recursos: ¿Qué necesito para realizar mi investigación?, ¿dónde y cómo puedo recolectar los datos que necesito?, ¿cuánto tiempo me tomará recolectar esos datos y cuánto tiempo analizarlos?, ¿necesito de un equipo colaborador o puedo realizar la investigación yo solo?, ¿cuáles costos debo contemplar? Todas esas preguntas te ayudarán a evaluar los recursos con los que cuentas y los que vas a necesitar. Esto es de gran influencia para escoger un tema de investigación.

3- Elige un tema y delimítalo: para elegir el tema primero debes observar una problemática de investigación, es decir, una situación que se deba estudiar con el fin de describirla, explicarla y, si es necesario, darle solución. Un error muy común a la hora de elegir el tema es la falta de delimitación, entre más concreto sea el tema, mejor se establecerán los límites y alcances de la tesis.

Un tema poco especificado trae como consecuencia inconsistencia o demasiada amplitud en la investigación, lo cual alargaría indefinidamente la realización de la tesis. Si como tema de se decide estudiar los efectos de los fertilizantes químicos en las plantas y las consecuencias para el consumo humano, a primera vista podría parecer un tema apropiado, sin embargo la falta de especificidad ocasionaría los siguientes problemas: el número, tipo y variedades de plantas, también el tipo de fertilizantes. La investigación deberá abarcar todas las plantas comestibles y todos los fertilizantes químicos. Lo adecuado, entonces, sería establecer el tema se la siguiente manera: Los efectos de “X” fertilizante químicos en las plantas “X” y su consecuencias para los humanos.

4- Busca un tutor y consulta con él tu tema: un tutor es la persona más idónea para informarte sobre la validez o pertinencia de tu tema, como experto en la materia te puede orientar mejor tu tesis. En ocasiones, un tutor puede hacer que desistamos de cierta línea de investigación y por eso es muy importante, antes de comenzar, corroborar con un experto si nuestro objeto de estudio tiene o no valor.

5- Comienza en arqueo bibliográfico: busca las fuentes de consulta para tu investigación y prepárate para leer grandes cantidades de información. Es necesario leer mucho y antes de escribir la tesis, incluso leer dos o tres veces el material. La primera lectura te servirá para decidir cuales fuentes son realmente pertinentes. No descartes ningún material sin antes leerlo bien, puedes encontrar datos valiosos en los lugares menos pensados.

6- Realiza una segunda lectura de tus fuentes: esta lectura debe ser cuidadosa para comprender a plenitud las teorías o datos que fundamentan tu investigación. Haz conexiones entre tus fuentes y tus propias opiniones. Establece diferencias y puntos de vistas contrarios, esto te ayudará a defender mejor tus juicios de valor.

7- Subraya y haz anotaciones de tus lecturas: realiza análisis de las partes de información relevantes para tu trabajo, marca el texto que consideres que puedes citar y lleva un registro de tus referencias. Así, no tendrás que volver varias veces sobre la misma fuente y podrás recordar fácilmente lo que has leído.

8- Establece un cronograma para cada uno de los pasos metodológicos de tu investigación: esto te servirá para llevar un control sobre el tiempo que dedicas a cada uno de los pasos y procesos de tu trabajo y un registro de los objetivos logrados.

9- Elabora un anteproyecto: en la mayoría de los casos este es un requisito indispensable para luego proceder con la tesis. Un buen anteproyecto es una excelente guía, tendrás la mitad del camino andado y tus metas claras. Muchos de los puntos del anteproyecto también se manejan en la tesis, pero con un tratamiento más profundo. Si ya conoces la metodología sabrás los aspectos y criterios que debes desarrollar en este punto.

10- Se original y creativo: una buena investigación te puede llevar a proponer conocimientos valiosos que sirvan para trabajos futuros. No copies el material de otros, el plagio no es ético y perjudica el avance del conocimiento intelectual.

Fuente: normasapa.net

Comentarios
* No se publicará la dirección de correo electrónico en el sitio web.
ESTE SITIO FUE CONSTRUIDO USANDO