La lectura es un factor importante en la adquisición de la cultura, de los conocimientos científicos y tecnológicos. Se torna imprescindible para analizar su contenido, estudiar el texto, descifrar, explicar, interpretar resumir, escoger los elementos más importantes y significativos luego aprender el significado de las palabras y utilizar el vocabulario asimilado. Según Francisco Leite, para el investigador, docente y estudiante, es necesario saber lo que hace una lectura eficiente, lleva al lector retener, atraer e integrar los conocimientos adquiridos y hasta elaborar esquemas para las clases, exposiciones técnicos culturales, transmisión y aprendizaje de conocimientos científicos.
Un lector instruido y culto sabe cómo sacar el máximo provecho de una lectura, principalmente de aquella que es utilizada como técnica, instrumentos sistemáticos de la investigación científica, sobre todo de la investigación bibliográfica. La lectura es considerada el mayor y más importante elemento, imprescindible para lo que quieren ser investigadores, obtener y asimilar los conocimientos científicos, atribuyendo así para la evolución cultural de la humanidad.
En consecuencia, la lectura es clave para formar investigadores y el lector que se desarrolla en esta esfera requiere cierta competencia que le permita realizar un trabajo con rigor científico, puesto que la investigación demanda lectores eficientes, que formulen hipótesis, generen soluciones, comparen, analicen y describan hechos y procesos, clasifiquen, narren y reflexionen en los conocimientos adquiridos y los nuevos. Todas éstas son operaciones que se realizan desde la observación y la experiencia, pero en mayor medida desde la información que se lee.
Fuente:APA